Una de las decisiones más importantes que vas a tomar en tu vida es comprar una propiedad. Por este motivo resulta imprescindible realizar una evaluación exhaustiva previa a firmar cualquier contrato.
Una evaluación de la propiedad consiste en realizar una inspección al detalle y se realiza por parte de un profesional cualificado que se encarga de analizar el estado general de un inmueble. Esta inspección incluye una evaluación de la estructura, los sistemas (eléctrico, de plomería, calefacción), el estado de conservación y posibles daños ocultos.
¿Por qué es necesaria una evaluación?
- Identifica los problemas ocultos: una evaluación te ayuda a revelar problemas estructurales, de humedad, de plagas o de instalaciones que a simple vista pueden pasar desapercibidos. Estos problemas pueden ser difíciles de reparar y reducen significativamente el valor de la propiedad.
- Estima de forma más precisa su valor: una evaluación es clave para determinar si el precio de venta de la propiedad es justo y si se ajusta a su valor real de mercado.
- Ayuda a negociar: con los resultados de la evaluación en mano se puede negociar el precio de ventas o solicitar una reparación al vendedor si se requiere.
- Aporta tranquilidad: tras una evaluación podrás cerciorarte de si has adquirido una propiedad en buen estado y te evitarás problemas futuros.
Un informe de evaluación detallado incluirá información sobre ciertas áreas que te darán una visión global del estado de la vivienda antes de tomar una decisión firme sobre comprarla o no. Algunos de los aspectos más destacados del informe son:
- Estado de la estructura: Paredes, techos, cimientos, etc.
- Sistemas: Eléctrico, de plomería, calefacción, ventilación y aire acondicionado.
- Cubierta: Tejado, canalones, bajantes.
- Acabados: Suelos, paredes, pintura, etc.
- Instalaciones: Cocina, baños.
La amenaza real de los vicios ocultos
Los vicios ocultos son defectos o daños en una propiedad que no son visibles a simple vista y que afectan a su uso o habitabilidad. Estos defectos pueden ser estructurales, de instalaciones o relacionados con la salud (como la presencia de amianto).
Lo ideal es solicitar una evaluación antes de firmar cualquier oferta de compra. De esta manera, tendrás tiempo suficiente para analizar los resultados y tomar una decisión informada.
Invertir en una evaluación de la propiedad es una inversión en tu futuro. Te protegerá de sorpresas desagradables y te permitirá tomar una decisión de compra informada y segura. No escatimes en este paso, ya que los beneficios a largo plazo superarán con creces el gasto que pueda suponer la evaluación. Contacta con nosotros para más información.