Ya empezó noviembre y del verano no queda ni siquiera la nostalgia. El otoño es una realidad irrefutable. Entonces, sigue nuestro consejo experto: este es un excelente momento para vender tu segunda residencia.
¿Por qué? El final de la temporada de vacaciones es cuando la gente comienza a buscar casa vacacional. ¡La demanda está activa!
Si esperas a la primavera es probable que obtengas una alta rentabilidad, dado que el verano se acerca y la prisa por adquirir una segunda residencia le otorga mucho valor. Sin embargo, en verano hay una oferta cada vez más alta, y esto no contribuirá mucho a vender tu casa al precio más alto. Por lo que si esperas a primavera, tendrás pocos meses para poder hacer destacar tu casa, y un mercado saturado de anuncios te dificultará bastante la labor.
Pero, entonces, el otoño y el invierno llegan y con ellos los meses más propicios para cerrar los acuerdos más convenientes. Como ya te anticipamos, aparecen la mayor cantidad de compradores y la competencia disminuye. ¡El escenario es ideal! Y lo mejor de todo… ¡Es ahora!
Lo cierto es que, como habrás notado, las segundas residencias requieren una estrategia de venta muy diferente a la de las residencias habituales. Y hay muchos factores a tener en cuenta tanto para los vendedores como para los compradores.
Si eres vendedor, una pregunta clave para orientarte antes de iniciar el proceso es: ¿cuánta urgencia tienes por vender la vivienda?
Si, por el contrario, te toca jugar el rol de comprador, antes de hacer una oferta te recomendamos plantearte: ¿cómo de rápido te gustaría poner en uso la propiedad que estás considerando comprar? Y, además: ¿estás dispuesto a sacrificar tiempo o comodidades para conseguir una mejor oferta al comprar?
Lo anterior fue solo un paréntesis, pues este blog está dirigido a quienes quieren vender su casa. Pero en Vidamar siempre tenemos en cuenta todas las variables, y muchos de los propietarios deciden vender para comprar algo nuevo, algo mejor o simplemente algo distinto.
Ahora bien, ¿qué características debería tener esa segunda residencia para que se venda a un buen precio? ¿Cómo puedes potenciarla? ¡Toma nota!
Lo que no se ve
No todo es fachada y cosas bonitas: un comprador también se fijará en aquello que no se ve y que impacta directamente en la calidad y el estilo de vida. Te aconsejamos empezar a revisar lo siguiente:
- Confort térmico: es lo que evita que no haga ni demasiado frío en invierno ni demasiado calor en verano. Tener ventanas con rotura de puente térmico es una forma rápida de conseguirlo.
- Consumo de energía: muy relacionado con lo de arriba en cuanto a la calefacción y la refrigeración, pero también vinculado a una buena iluminación para evitar el gasto excesivo de electricidad.
- Ventilación: crea circuitos de circulación del aire para que la calidad de la ventilación sea suficiente.
Lo que se ve
Y aquí vamos con las clásicas, para las que cada propietario tiene que cuidar:
- La pintura del hogar debe estar en condiciones, por lo que te recomendamos tener la casa pintada.
- El suelo puede ser de baldosa o parquet, pero no debe tener problemas ni estar en mal estado.
- Hay que intentar corregir o disimular las posibles humedades que haya en las paredes o en los techos.
- Se debe cuidar la limpieza para dar una buena impresión, tanto en la sesión de fotos como en las posibles visitas.
- ¡Intenta que huela bien! Si la casa tiene un aroma agradable, las visitas se irán con una mejor imagen.
- Si la casa tiene jardín, mantenerlo lo más cuidado posible es un gran plus.
Recuerda que para toda operación de compra y venta de inmuebles lo mejor es estar asesorado y para ello cuentas con Vidamar.
